Pasamos más de media década en el "pienso" y los últimos 20 años que nos quedan decimos “luego existo”.
Ver más allá de lo ordinario
Era un poco más tarde, lo supe porque comencé a ver el cielo cambiar de rojo a violeta y un tono más oscuro. Tal vez dormía aún o era el calor que me aletargaba pero al divisar el horizonte para ver el atardecer me percaté de los planetas que aparecían conforme se hacía más tarde.